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Presidente Hernández: “El pleito no nos lleva a ningún lado”

– “Para pelear se ocupan dos”, afirma el gobernante.

Tela (Atlántida).- “A los pleitistas les mando un mensaje: a mí no me van hacer pelear con nadie. Mi papá me enseñó que para pelear se ocupan dos, el pleito no nos lleva a ningún lado”, afirmó hoy el presidente Juan Orlando Hernández en relación a la controversia generada en las redes sociales por las fotografías de su participación en un almuerzo con diputados de Libre, Partido Liberal y Pinu en el Congreso Móvil celebrado en Gracias (Lempira).

En el marco de la entrega de 2,166 beneficios de Vida Mejor en Tela, el gobernante Hernández explicó que “le dije al presidente (del Congreso) Mauricio Oliva que quería invitar a los diputados a almorzar; una, porque están en mi departamento, y dos, porque es el último año que ellos tienen como diputados”.

“Yo llegué y, como es normal, saludé. Mi papá me enseñó que, cuando a uno lo invitan acompañar a alguien a comer, uno debe ser educado y aceptar la invitación; es un gesto de cortesía y caballerosidad”, indicó Hernández.

“El presidente Manuel Zelaya me preguntó que dónde me iba a sentar y yo le dije que ‘en alguna mesa de estas, porque no he comido’. Luego me dijeron que me sentara en la mesa y hablamos como seres humanos que somos, a platicar”, detalló el titular del Ejecutivo.

Y prosiguió diciendo que “luego el presidente Zelaya me dijo que ‘necesitamos este decreto que se apruebe para que las elecciones sean más transparentes’ y le dije: ‘muy bien, analicémoslo, entre más transparente mejor’. Fue una plática muy cordial”.

Foto sin fundamento

El presidente Hernández contó que se sorprendió del impacto que tuvo en redes sociales la fotografía del encuentro.

“Y yo me pregunto: ¿Yno somos hermanos hondureños todos? Usted puede tener al vecino que más lo critica, como en este caso Mel me critica a mí, y solo por eso, si está en mi casa, ¿no lo voy a invitar a comer? Claro que lo voy a invitar a comer, eso es de gente que respeta a los demás”, aseveró.

“Entre hermanos hondureños no importa el partido político o la religión; al final todos somos hermanos y mi deber como presidente es escuchar a todo mundo, es parte de mi trabajo”, subrayó.

El presidente Hernández concluyó diciendo que “nuestros enemigos son la delincuencia, la falta de empleo y la pobreza”.

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