Tegucigalpa, Honduras.- La científica hondureña, María Elena Bottazzi, agradeció este viernes a la Presidenta Xiomara Castro por honrarla con la presea Clementina Suárez, durante una ceremonia especial realizada en la Casa de la Cultura de la ciudad de Juticalpa, Olancho, tierra que la vio crecer.

La hondureña que apoyó el desarrollo de la vacuna Corbevax, contra la COVID-19, aseguró tener tres poderosas razones para sentirse orgullosa de sus raíces olanchanas.

Bottazzi y su orgullo por Olancho

Estas son que en el departamento se cimentó la educación de vanguardia, el folclor y las tradiciones y finalmente el corazón y la fortaleza del olanchano.

Inició detallando como primera razón que, “fue en Olancho que se cimentó el legado de la educación de vanguardia, tal vez pocos saben que la educación en importantes centros escolares fue lo que dio paso al nacimiento de tantos y tantas prominentes figuras olanchanas a fines del 1870”.

“Son las nuevas generaciones y los jóvenes hondureños la pieza clave en la recuperación de la cultura, la música, el arte, la literatura y el deporte en Honduras, por eso es muy buena noticia que Honduras y departamentos como Olancho, ya están introduciendo en sus agendas, estrategias que incluyen el modelo educativo de vanguardia, el cual busca que los estudiantes desde su formación básica desarrollen proyectos de una sólida formación en ciencia, tecnología, ingeniería, artes, matemáticas y las humanidades”, dijo.

La segunda razón que llena de orgullo a Bottazzi es que, según sus palabras, “Olancho siempre ha sido y es una zona bendecida, como sucede en casi todos los municipios de Honduras, las iglesias de los siglos pasados, las creencias, las leyendas, las tradiciones el folclor, siempre ocupan un papel muy preponderante en la historia, es un conjunto de estas tradiciones que son los pilares de nuestra Patria y un regalo para las futuras generaciones”.

“Y por último, yo creo que lo más importante y aquí yo creo que es que me voy a poner hasta llorar, y es por el corazón y la fortaleza del olanchano, ser olanchano es ser familia”, exteriorizó y al tiempo recordó cuando con amigos iba a montar a caballo.

Para la doctora, formar lazos fuertes de amistad y familiaridad, es el núcleo fundamental de la sociedad, “y por eso en este mes cívico hay que recordar que todos somos familia en Honduras y su futuro necesita que los jóvenes sean los generadores de cambio”.

Finalmente, expresó nuevamente su agradecimiento a la primera mujer presidenta de Honduras por tan emotivo y valioso gesto a su persona.